El presidente de la RFEA: José María Odriozola explicó en rueda de prensa las razones de este nuevo cambio: "Pretendemos que todos aquellos atletas populares que se pongan a prueba en competición cumplan con unos valores mínimos de estado físico y seguridad para la práctica de este deporte tan duro y riesgoso". Para ello esta nueva versión del Carnet del corredor (las anteriores: Básico y Plus) tendrá un coste de 200 euros anuales y obligará a todos aquellos que compitan dentro de las carreras populares del calendario de la RFEA a cumplir una serie de requisitos, a saber: no fumar, no beber más de dos cañas o copa de vino a la semana (se comprobará el aliento a la salida) y superar el Test de Cooper en una prueba realizada anualmente en pista de atletismo según baremo por edad y sexo. Todo aquel que no cumpla estos requisitos y no aporte los 200 euros anuales se verá imposibilitado a competir en las carreras del calendario de la RFEA, será considerado como "runner pirata" si lo hace sin dorsal o falsificado, podrá ser sancionado con multas de hasta 6.000 euros y tendrá negada la asistencia sanitaria en caso de accidente o ataque cardíaco.
Pero este nuevo carnet concede también nuevas ventajas al poseedor, a la suma de las anteriores ya aportadas por el Carnet del corredor Plus hay que sumar muchas otras que, según Odriozola, hacen rentable su adquisición. Por ejemplo se anunciaron la obtención de un llamado "kit paliativo" formado por una caja de tiritas de Compeed anti-ampollas, Reflex, tiritas pezoneras, caja de Ibuprofeno, crema de Arnica y vaselina. Envio mensual a domicilio de 10 litros de Gatorade. También un seguro de ampollas y uñas negras y un nuevo seguro especial "Anti-rayo", debido al peligro que supone correr a la intemperie. Unas sesiones de entrenamiento con Manuel Pascua. Subvenciones para el ingreso en Proyecto Runner. Descuentos en marcas de primer nivel como Kelme, J´Hayber o Paredes. Barra libre de pasta en los restaurantes adscritos a la RFEA (al menos ya existe uno). Y muchas otras previstas que se irán anunciando y que en palabras del presidente de la Federación: "sabemos que con estas nuevas ventajas lo vamos a petar".
Además la RFEA ha conseguido cambiar la legislación vigente para que toda aquella carrera popular en la que sea necesaria la intervención de las administraciones públicas pase a formar parte del calendario de la RFEA por lo prácticamente será obligatoria la presentación de dicho carnet en todas las carreras populares en las que existan cortes de tráfico y asistencia de cuerpos sanitarios y de seguridad.
El organizador de carreras populares: Mengano Carreras, ya ha manifestado su absoluta repulsa a estas nuevas condiciones y avisa que las nuevas medidas harán: "que a nuestras carreras no venga ni Dios". Piensa que la RFEA esconde tras sus razones de mayor seguridad para los participantes una clara obsesión recaudatoria. Amenaza con organizar carreras "piratas" convocadas por el método "pásalo" vía móvil o a través de redes sociales como Twitter o Facebook. "Podemos ser capaces de organizar una carrera con miles de corredores que colapsen las calles más céntricas si nos lo proponemos".
Odriozola responde al pulso de Carreras: "aquel que quiera correr sin seguridad y a propio riesgo que se organice una carrerita con los amiguetes en el parque. Pero si Carreras quiere llegar más lejos tendrá que verse las caras con la Policía Antidisturbios". A lo que el organizar contesta que "eso sería una motivación más para hacer buena marca".
Aún no sabemos la reacción de los que serán beneficiados o perjudicados por este nuevo carnet: los corredores. La redacción espera que este mismo medio sea un punto de opinión y debate al respecto.
(Todo lo anteriormente escrito es totalmente en broma, por favor, señor Odriozola no me denuncie, no soy un muñegote francés).
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